
La cultura invisible: lo que pasa cuando nadie mira
Sep 12, 2025Cuando pensamos en cultura organizacional, solo imaginamos frases inspiradoras en la pared o valores en un manual. Pero la cultura real vive en lo que hacemos sin darnos cuenta.
Harvard Business Review insiste en que “la cultura no se cambia con discursos, sino con los microcomportamientos que se repiten cada día” . McKinsey lo respalda con datos: la desconexión cultural y la falta de pertenencias están entre las principales causas de rotación, con costos millonarios en productividad (entre $228M y $355M al año para una empresa mediana del S&P500).
En un mundo acelerado, donde todos corren con poco tiempo para lo esencial en lo personal, los beneficios no definen la cultura. La mesa de billar, las frases motivacionales en vinilo o la fruta gratis en la oficina no reemplazan lo que de verdad importa: pertenencias, reconocimiento y confianza. Todo eso suma, sí, pero no es lo que sostiene.
Ejemplos claros:
- En un lugar, los errores se ocultan. En otro, se comparten para aprender.
- En un equipo, las ideas nuevas son silenciadas. En otro, son celebradas.
Mismo proceso… culturas radicalmente distintas.
Por eso, transformar cultura no es escribir nuevos valores. Es hacer consciente lo invisible que ya la moldea: rituales, hábitos, microdecisiones.
Ejercicio de la semana:
Detén la mirada en esos momentos invisibles. Observa cómo se da feedback, cómo se celebra un logro, cómo se reacciona ante la presión. Pregúntate: ¿qué cultura estamos reforzando aquí?
La clave para transformar una cultura no es llenar de perks ni escribir slogans nuevos, sino hacer visible lo invisible que realmente moldea el día a día.
Escrito por Gabriel Figueroa – E-Stratify